Hace unos días pensaba que este pequeño compendio de

sentimientos, de emociones que

revela mi estado de ánimo y que me sirve para contabilizar mi pena y mi

alegría,debía dejar espacio a otros protagonistas, a esa gente que ha pasado y pasa a

diario por mi vida , para irse o quedarse.

En resumidas cuentas trataba de convencerme de que debía invertir esta viciosa tendencia a hablar de mi misma.

Mentalmente llegué a hacer un listado de las personas a las que me gustaría traer hasta aquí para dejar testimonio de que un día fuimos tiempo y frontera.

Es decir, hablar de aquellas que pasaron y me llevaron a conocer a otras, de las que me invitaron a una tarde ociosa, de las muchas que diseñaron para mí un perfecto itinerario hacia el olvido y de las que siempre, están ahí , dando forma a los recuerdos futuros.

Pensar en ellas me da para componer una pequeña base de datos. Nombre, gesto, primer beso, concierto, primero, segundo, quinto.. de carrera?Barcelona,Madrid, Puerto Príncipe? Verano, palabra clave.

Pero devolverles la forma antigua sólo con el peso del recuerdo es ingrato y poco realista.

La memoria es nuestro legoland soñado y rara vez su contenido se asemeja por completo a la realidad que le dió referencias y la convirtió en pasado.

Pero es tan lindo dejarse llevar por esa reconstrucción selectiva de la realidad que es el recuerdo.

...........Y mi memoria-niña me traslada a tantos sitios.....

......Y en casi todos ellos hay alguien que se parece tanto ....a tí.