Si dijera que no me gusta lo bello, mentiría; me gusta, supongo que como a la mayoría de la gente, pero más que lo hermoso, me encanta lo extraordinario, lo inusual, aunque no entre dentro de los cánones clásicos de belleza (no se quien demonios los invento, ¿los griegos, los romanos, la industria cosmética?). No puedo evitar quedarme fascinada ante parejas que resultan disonantes, hombres guapísimos con mujeres corrientes, mujeres increíblemente atractivas con hombres aparentemente comunes, parejas con edades muy diferentes, de diferentes razas, del mismo sexo, contables que beben los vientos por la panadera de su barrio, colegialas que se enamoran perdidamente del padre de su mejor amiga. Me seducen enormemente los rostros difíciles, los extremos, los colores chillones, los cabellos que desafían las leyes de lo políticamente correcto e incorrecto, la gente que vive sin pudor o con el siempre a cuestas. Y en el fondo de esa fascinación se encuentra la pregunta que siempre me hago, ¿si no es la atracción física, ni el deseo que produce la belleza del otro lo que une a esas dos personas tan diferentes, (algo que suele considerarse indispensable) que mecanismos se encienden para que se produzca esa combinación?, deben de ser muy poderosos para que algo así ocurra, es como presentarse al otro, desnudo, enseñando desde el principio lo que somos, sin coartadas ni tapujos.
Me gusta especialmente, el principio del libro de Marguerte Duras “El amante”
“Un día, ya entrada en años, en el vestíbulo de un edificio publico, un hombre se me acerco. Se dio a conocer y me dijo: << La conozco desde siempre. Todo el mundo dice que de joven era usted hermosa, me he acercado para decirle que en mi opinión la considero mas hermosa ahora que en su juventud, su rostro de muchacha me gustaba mucho menos que el de ahora, devastado>>”
Por cierto, si me dieran a elegir entre pasar una noche con un guapo modelo, y woody Allen, creo que me quedaría con el ultimo, bajito, lo suficientemente feo y rarito como para ponerme como una moto solo de pensarlo, eso si, quizás durante la noche, me acordase varias veces del guapo modelo.
Hace unos años estuve en Marruecos, (en la frontera de Argelia) en la boda del hermano de mi amigo Nordin, nunca antes vi mujeres más hermosas, y no por su belleza ni su juventud, lo menos importante era la edad o su fisico, algunas de ellas eran muy ancianas, era su porte lo que las hacia bellas, semejaban reinas, tenían una elegancia que les nacía de dentro, intemporal, mujeres que trabajaban en cuclillas haciendo pan, cocinando para los invitados, llenando vasos de te y ofreciendo comida, pero sin perder nunca la compostura, con una dignidad que ya desearían muchos. Algunas llevaban curiosos tatuajes en la cara, que junto a las maravillosas ropas de los colores y diseños más increíbles que he visto nunca, las hacían parecer personajes de historias mágicas. Había una anciana en especial, la abuela del novio, su rostro era como un mapa cartográfico de su vida, cientos de arrugas lo inundaban semejando ríos, cordilleras o accidentes geográficos, y sobre ellos pequeños símbolos tatuados de un color desvaído. Llevaba la cabeza cubierta con un pañuelo a modo de turbante, del que asomaban mechones de pelo tintados con hena de un color suave, andaba muy encorvada, de una manera casi imposible, deduzco que debido al trabajo, todo lo hacía en cuclillas o inclinada sobre el suelo, tenia las manos pintadas también de hena, la punta de los dedos y dos círculos en las palmas. Pero lo mas impresionante de todo, eran sus ojos. Solo había que asomarse en ellos, para darse cuenta que la belleza puede residir en los lugares mas insospechados.
Me ha encantado recordar esto contigo, pero es muy tarde y tengo que irme dormir. Por cierto espero que la contestación a tu pregunta del señor alto y muy guapo sea lo suficientemente arrebatadora como para quedarse colgada en su cuello, aunque sea de puntillas.
JO, ANA, QUÉ FUERTEEEEEEEEEEEEEEEEE¡¡¡¡¡ Esa foto primera, la elegí yo para mi primer post de mi blog nuevo, pero luego se me perdió, y tuve que poner la otra de Match Point, en el post de besos torpes... Tú eres una barbiesuperstar en moreno, nena, y la pregunta sería al revés formulada, para que tu tuviese a mano el listado de todas las maravillas que escondes detrás de esos ojos que transmiten tanto... Yo creo que menos preguntas... y mas acción-reacción¡ Oye, el x, si tienes rato, nos vemos un minuto, o dos... yo tb lo tengo liado, pero me gustaría... Ah, y por dios, si es guapo, y encima articula palabra.... HAZLOTUYOYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA¡
Pues lo que hemos vistos todas/os Ana, pero en versión man.
Hombre a mi tambien me gustan los "men" grandes y guapos. Pero si tu hubieras sido hombre, me casaría contigo. (Aúnque sólo fuera un mes, por el mero hecho de estar contigo). Es más hay una amiga -en común- por Madrí, que coinciden en lo mismo conmigo. Osea que,
8 comentarios:
Si dijera que no me gusta lo bello, mentiría; me gusta, supongo que como a la mayoría de la gente, pero más que lo hermoso, me encanta lo extraordinario, lo inusual, aunque no entre dentro de los cánones clásicos de belleza (no se quien demonios los invento, ¿los griegos, los romanos, la industria cosmética?).
No puedo evitar quedarme fascinada ante parejas que resultan disonantes, hombres guapísimos con mujeres corrientes, mujeres increíblemente atractivas con hombres aparentemente comunes, parejas con edades muy diferentes, de diferentes razas, del mismo sexo, contables que beben los vientos por la panadera de su barrio, colegialas que se enamoran perdidamente del padre de su mejor amiga. Me seducen enormemente los rostros difíciles, los extremos, los colores chillones, los cabellos que desafían las leyes de lo políticamente correcto e incorrecto, la gente que vive sin pudor o con el siempre a cuestas.
Y en el fondo de esa fascinación se encuentra la pregunta que siempre me hago, ¿si no es la atracción física, ni el deseo que produce la belleza del otro lo que une a esas dos personas tan diferentes, (algo que suele considerarse indispensable) que mecanismos se encienden para que se produzca esa combinación?, deben de ser muy poderosos para que algo así ocurra, es como presentarse al otro, desnudo, enseñando desde el principio lo que somos, sin coartadas ni tapujos.
Me gusta especialmente, el principio del libro de Marguerte Duras “El amante”
“Un día, ya entrada en años, en el vestíbulo de un edificio publico, un hombre se me acerco. Se dio a conocer y me dijo: << La conozco desde siempre. Todo el mundo dice que de joven era usted hermosa, me he acercado para decirle que en mi opinión la considero mas hermosa ahora que en su juventud, su rostro de muchacha me gustaba mucho menos que el de ahora, devastado>>”
Por cierto, si me dieran a elegir entre pasar una noche con un guapo modelo, y woody Allen, creo que me quedaría con el ultimo, bajito, lo suficientemente feo y rarito como para ponerme como una moto solo de pensarlo, eso si, quizás durante la noche, me acordase varias veces del guapo modelo.
Hace unos años estuve en Marruecos, (en la frontera de Argelia) en la boda del hermano de mi amigo Nordin, nunca antes vi mujeres más hermosas, y no por su belleza ni su juventud, lo menos importante era la edad o su fisico, algunas de ellas eran muy ancianas, era su porte lo que las hacia bellas, semejaban reinas, tenían una elegancia que les nacía de dentro, intemporal, mujeres que trabajaban en cuclillas haciendo pan, cocinando para los invitados, llenando vasos de te y ofreciendo comida, pero sin perder nunca la compostura, con una dignidad que ya desearían muchos. Algunas llevaban curiosos tatuajes en la cara, que junto a las maravillosas ropas de los colores y diseños más increíbles que he visto nunca, las hacían parecer personajes de historias mágicas.
Había una anciana en especial, la abuela del novio, su rostro era como un mapa cartográfico de su vida, cientos de arrugas lo inundaban semejando ríos, cordilleras o accidentes geográficos, y sobre ellos pequeños símbolos tatuados de un color desvaído. Llevaba la cabeza cubierta con un pañuelo a modo de turbante, del que asomaban mechones de pelo tintados con hena de un color suave, andaba muy encorvada, de una manera casi imposible, deduzco que debido al trabajo, todo lo hacía en cuclillas o inclinada sobre el suelo, tenia las manos pintadas también de hena, la punta de los dedos y dos círculos en las palmas. Pero lo mas impresionante de todo, eran sus ojos. Solo había que asomarse en ellos, para darse cuenta que la belleza puede residir en los lugares mas insospechados.
Me ha encantado recordar esto contigo, pero es muy tarde y tengo que irme dormir. Por cierto espero que la contestación a tu pregunta del señor alto y muy guapo sea lo suficientemente arrebatadora como para quedarse colgada en su cuello, aunque sea de puntillas.
Muchos besos
JO, ANA, QUÉ FUERTEEEEEEEEEEEEEEEEE¡¡¡¡¡ Esa foto primera, la elegí yo para mi primer post de mi blog nuevo, pero luego se me perdió, y tuve que poner la otra de Match Point, en el post de besos torpes...
Tú eres una barbiesuperstar en moreno, nena, y la pregunta sería al revés formulada, para que tu tuviese a mano el listado de todas las maravillas que escondes detrás de esos ojos que transmiten tanto...
Yo creo que menos preguntas... y mas acción-reacción¡
Oye, el x, si tienes rato, nos vemos un minuto, o dos... yo tb lo tengo liado, pero me gustaría...
Ah, y por dios, si es guapo, y encima articula palabra.... HAZLOTUYOYAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAAA¡
Pues lo que hemos vistos todas/os Ana, pero en versión man.
Hombre a mi tambien me gustan los "men" grandes y guapos. Pero si tu hubieras sido hombre, me casaría contigo. (Aúnque sólo fuera un mes, por el mero hecho de estar contigo).
Es más hay una amiga -en común- por Madrí, que coinciden en lo mismo conmigo.
Osea que,
de solterita nada eh?
Bienvenida a la felicidad sumus.
(Hay esos besos con lengua, ay!)
;P
es que las bajitas son tan sexys... a nosotros, los guapísimos, nos encantan!
Quizás vio a Ana, dentro o fuera de su gata…
me pregunto lo mismo.
Petita, siempre escribes sobre lo que quiero leer.Coincido contigo: yo tab me quedaría con Woody Allen.;)
Deliriummmmmmmmmmmmmmm que te llamééé pero con tanto médico y visita me lié lié.Te cuento. Me escapo y voy a verte!
Coble!!! y si el tipo resulta ser mi tipo????? jo!!!
Lagarto jajajajajajajaja pero qué malo es usted!!! (con tono de la bruja avería)
Max, claro!!! igual me vió dentro!!!Max es como alicia en la madriguera cuando se toma el jarabe áquel te acuerdas????
Mari...y como encima sea deportista ya ...será caso para Scully y Mulder ;)
I remember everything. Yes, it's as much a blessing as it is a curse. xoxo
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