Marisa Bustinduy

(Aquel día Zapatero desayunó en el bar del bloque donde yo vivía de pequeña y donde ponía el tocadiscos de mi madre)

Escribí ésto hace algunos meses. Es admirable el tesón de Marisa.El esfuerzo que ha realizado y el compromiso mantenido.No es fácil ser mujer y estar en política. Nos merecemos esta alcaldesa.

Madame Royal y Señora Bustinduy (1/10/2006)

La compañera Sególéne Royal libra una dura pugna por hacerse con la candidatura a las próximas presidenciales francesas por el partido socialista . A Madame Royal las encuestas le son más que favorables y el tenso clima que se respira en el seno del partido parece no alterar los nervios de la que puede convertirse en la primera ministra de nuestro país vecino.

Ségoléne lo tiene todo para suscitar comentarios de corte machista: es atractiva (algunos rotativos franceses han publicado hasta fotos de ella en bikini, espléndida a sus cincuenta y tres años), no se muerde la lengua a la hora de calificar de misóginos a los políticos franceses, y es la compañera sentimental y madre de los cuatro hijos del secretario general del partido,Francoise Hollande, algo que en política pesa mucho y si no que se lo pregunten a Carmen Romero o la mismísima Hillary Clinton.

Pero quizá las críticas más duras que ha tenido que encarar Ségolene Royal son las que provienen del mismo partido socialista francés. Un ejemplo de las mismas han sido las continuas referencias de mi admirado Jospin a la “democracia de opinión ” de Madame Royal insinuando la supuesta baja preparación intelectual de la mujer que pretende liderar un gobierno como el de Francia.

Probablemente en el momento de hacer esas declaraciones el sesudo pensandor de izquierdas olvidó que, en las pasadas elecciones, el mismo fué vencido (en primera vuelta nada más y nada menos )que por el fascista descerebrado de Le Penn, poniendo en duda si la carrera por la presidencia en aquel momento era una cuestión de cerebro o de huevos.(para ello véase programa electoral de Le Penn y sus propuestas sobre política migratoria que dejan a Sarkozy camino de la canonización ).

La vieja guardia roja del partido socialista francés también ha salido de sus cuarteles de invierno para exigir a Hollande que presente su candidatura y de esta forma evitar la proliferación de candidatos /as.

Menudo sapo debió tragarse la señora Royal al escuchar aquello, perpleja ante el cisma familiar que se le podía avecinar, con su marido retirándola de unas posibles primarias.

Lo cierto es que Ségolène Royal es una mujer de ideas claras, prácticas y bastante directa. Al menos así lo refleja en algunas entrevistas que he podido leer y en las que,con su particular visión como mujer y persona de izquierdas, centra su discurso en asuntos que la derecha considera “exclusivos de su propiedad intelectual ” como son la familia, la disciplina y los valores de los jóvenes, o las razones de Francia al rechazo a la constitución europea . Son asuntos que ,por otro lado, han venido marcando la actualidad del país galo. Baste recordar que el próximo mes de noviembre se cumplirá un año de las revueltas sociales en los barrios de todo el país y que aun está presente en la retina de los franceses el levantamiento general que provocó entre los jóvenes la infortunada ley de empleo con la que Sarkozy justificaba combatir las ya altas tasas de paro que padecen los jóvenes con un paquete de medidas que, en la práctica,condenaba a los aspirantes a un primer empleo a la precariedad laboral.

Por eso no es de extrañar que la que fuera Ministra de la Familia con Jospin hasta 2001 dirija su atención, como digo, hacia los temas sociales y lo haga destacando la igualdad de género un como recurso indispensable en su planteamiento de lo que debe ser la acción de gobierno (suena a Zapatero no?).

Y algo de este pensamiento ha debido calar en la militancia francesa cuando los sondeos realizados en el seno de la misma dan a Mdme Royal como favorita y cuando los responsables de organización del partido reconocen que tras la campaña de afiliación llevada a cabo en este último año, (con casi 80000 nuevas incorporaciones) , éste se ha rejuvenecido (ha bajado la edad media del militante a 43 años) y se ha feminizado(entre sus filas hay cada vez más afiliadas).

Siempre he creído que las elecciones las ganan personas para las personas y que, aunque soy una feminista practicante que votaría Zapatero antes que a Condoleezza Rice en cualquier comicio mundial , defiendo como imprescidible la presencia de mujeres en los cargos más representativos del gobierno si además de erradicar una desigualdad, cunde el ejemplo y se anima a las mujeres a participar en la vida política.

Después de seguir a Madame Royal estas últimas semanas he llegado a la conclusión de que es posible que gran parte de su éxito radique en presentar los valores asociados a la feminidad como una fortaleza y no como la debilidad a la que históricamente han sido relegados.

Por ejemplo, la maternidad, la mediación, la sensibilidad, la no-violencia son cualidades que sin ser exclusivas de las mujeres, sí han caracterizado a lo largo de la historia nuestra socialización en género.Tomadas convenientemente,en el contexto donde se analizan, es posible que estas cualidades puedan diferenciar la forma de hacer política de las mujeres respecto de la que hacen muchos hombres pero, ojo,también de la que desarrollan también “otras mujeres”(comparen si no a Miss Rice con la Presidenta de Chile, Michele Bachelet) .Resultaría interesante tener presente este hecho diferencial en la influencia sobre el voto para explicar la masiva afiliación de mujeres al partido socialista en Francia como el efecto de la ilusión que ha despertado una mujer con un discurso social y feminista con el que se han sentido identificadas.

En Málaga el partido socialista cuenta con una candidata al ayuntamiento ,Marisa Bustinduy . Las mujeres que hemos tenido la suerte de seguir su trayectoria profesional y política, conocemos su fuerte compromiso social , su perseverancia y las dificultades que como mujer y portavoz en la oposición ha debido enfrentar con un alcalde que tiene en su curriculum ni más ni menos que haber servido al difunto caudillo en la Diputación de Málaga.

He visto en algunos debates como Marisa se crecía a pesar de la actitud intolerante de la oposición y he comprobado como ha manifestado sentirse orgullosa de sus largos años de trabajo con menores (Marisa es pedagoga) y de su contribución a la creación de la actual red de centros de servicios sociales gracias a los cuales la Diputación de Málaga atiende a la población más vulnerable de la provincia. Y ella, como Ségoléne ,no tiene reparos a la hora de referirse a Málaga como la ciudad que quieren las personas, principalmente los jóvenes y las personas más vulnerables. Como una ciudad transitable, verde, dinámica y solidaria .En definitiva como una ciudad atractiva para sus principales inversores: los ciudadanos y las ciudadanas.

Ahora más que nunca, en un mundo a la vez globalizado y excluyente como éste, la ciudadanía debe exigir a los políticos que determinen claramente sus ideas y sus propuestas concretas sobre problemas sociales como el desempleo de los jóvenes, la violencia de género, la inmigración irregular, la falta de vivienda,el transporte público y accesible y el cuidado de nuestros mayores entre otros. Problemas que efectivamente también están afectando a la familia y cambiando los conceptos tradicionales sobre su composición y función en la sociedad.

Y por eso me alegra comprobar que dos mujeres vecinas de países vecinos, con dos trayectorias distintas pero destinos semejantes manejan el mismo código para traducir las necesidades de su municipio o de su país ,hablen sin reproche de la misoginia en la política o de la falta de apoyo a las familias sin caer en la demagogia o muestren la misma preocupacion por el futuro de los jóvenes que por la activación de la economía.

En resumen satisface ver dos líderes, dos mujeres, compartir la misma prioridad en su agenda política:las personas.